martes, 29 de septiembre de 2009

Y yo sigo enamorado de ella...

Palabras Mayores

Bécker García

"¿No será acaso que ésta vida moderna está teniendo más de moderna que de vida?

Mafalda

Yo la conocí por medio de un amigo que con el tiempo se ha convertido en mi hermano, Emilio Bórquez.

No recuerdo bien cuando fue la fecha exacta de cuando la puso en mis manos, pero, de verdad, quedé impactado con ella.

De pequeña estatura, calzaba zapatos de colegiala y por supuesto, como debe ser, con sus calcetas blancas. Además llevaba un vestido corto, a veces floreado, otras liso, que apenas y ocultaba sus regordetas piernas.

Si bien es cierto su cara era más del tipo común, su abultada melena era recogida con un gran moño que en ocasiones se perdía entre tanto cabello.

Ella amaba a lo Beatles y yo la amaba a ella.

Irreverente, profunda, inquisitoria, reflexiva, idealista y depresiva, me movía la conciencia cada vez que le daba la gana y, hasta la fecha, estallo de la risa con sus ocurrencias, tal y como debe de ocurrir con los grandes amores.

Mafalda, junto a Felipe, Susanita, Miguelito y Manolito, hicieron mi vida en un tiempo en que hablar con la verdad podía costarte muchas cosas.

Odiaba la sopa y veía a su madre como una especie de esclava doméstica con la cual peleaba por la insistencia de ella a servirle sopa, la cual odiaba.

Por su padre sentía una especie de conmiseración por su marcado conformismo.

Un hermano menor, pragmático y curioso, llamado Guille, completaban el cuadro de una familia clasemediera argentina.

Y es por estos días que me entero de primeros cuarenta y cinco años y me doy cuenta que la vida avanza casi sin sentirla.

En el laberinto de mis recuerdos, aún quedan algunas viñetas que no se me olvidan.

Llega Mafalda a su casa, silba avisando su llegada y mira alrededor; en la entrada está el recogedor y la escoba, en el pasillo un cesto de ropa y en la estufa cocinándose, la tradicional sopa. En el camino la madre le pregunta que si como le fue en la escuela y cuando ella llega hasta donde su progenitora está planchando ropa, ella le devuelve la cortesía; y a ti, “¿Cómo te va en este antro de rutina?”

Otra; El padre está leyendo el diario; llega Mafalda y le pregunta; Papá; “¿en las películas prohibidas para menores?...” hace una pausa, se le queda viendo y le dice… “deja, no importa, es algo demasiado fuerte para ti, mejor se lo preguntaré a cualquiera en la escuela”

La última: Mafalda ve la televisión y en un comercial de lavadoras, el locutor remata; “lavadoras blablabla, tan fácil de usar que hasta un niño puede hacerlo…” Mafalda se levanta frente al televisor y reclama; “¿O sea que para decir que hasta un señora idiota puede usar su máquina tienen que involucrar a los niños?”

Mafalda fue y es así. Su autor, Joaquín Salvador Lavado, alias Quino, la dibujó primero para incluirla en una publicidad de lavadoras que afortunadamente nunca se llevó a cabo.

Hace más de 20 años dejó de publicarla, porque dijo, el mundo solo le preguntaba por la niña que había crecido más que él. A lo mejor y el mundo le había quedado muy chico a Quino, para que cupieran los dos; al fin de cuentas, el artista es argentino.

Aunque así haya sido, Mafalda sigue viva entre los que, como ella, deseamos un mundo mejor para vivirlo y, seguimos peleando por él.

Gracias


lunes, 28 de septiembre de 2009

El perro en cuestión


Es este, en estado actual... pero, imagínense esas orejas en un cachorro de un mes... las tiene del mismo tamaño...

domingo, 27 de septiembre de 2009

El Color es la pertenecia


Palabras Mayores

Bécker García

“El color no es lo que nos distingue, solo es ocasional”

Víctor Hugo

Tengo un perro que sufre problemas de identidad.

Imagino que estos deben venirle desde su nacimiento: pastor australiano de raza, sus orejas enormes eran más grandes que su cuerpo y desde cachorro se miraba curioso.

Por lo mismo, mis vecinos, esos truhanes que no duermen de sábado por la noche a la madrugada del domingo cuando mas necesito descanso, lo motejaron como “el perro-burro”.

Desde el día en que mi hija lo trajo a casa, con el pretexto de que “era tan feo que me lo dejaron muy barato en la tienda de mascotas y no pude resistirme”, se encontró con varios problemas.

El principal, creo, es que nunca ha sabido a ciencia cierta quien es su dueño: Fue comprado para mi nieto, es Alma mi esposa quien lo pasea, supuestamente Renée mi hija es quien lo atiende (cuando se acuerda que existe) y soy yo, cuando llego estar en casa, quien le da las órdenes tajantes, las que por cierto, le entran por una megaorejota y le salen por la otra.

Batallé para comprarle una casita que lo protegiera de los rayos del sol en verano y del frío en el invierno, pero no la usa. Como si fuera Snoopy, este perro sube al techo y desde ahí le ladra a todo lo que se mueve.

Es un desastre.

Como los perros, también los humanos somos medio testarudos y nos comportamos como tales, aunque muchos, ya quisiéramos ser tan nobles como ellos.

La identidad se torna grave cuando uno se siente como perro. Cuando menos, como dicen por ahí, como perro de rancho.

Para no sentirse así, como perro, el hombre ha inventado ideales que debe alcanzar para reconocerse feliz.

Los que antes odiaban a los barbudos y sucios motociclistas que, con su princesa valkiria en asiento trasero circulaban por las carreteras, buscando pleitos y haciendo desmanes en cantinas, ahora quieren pertenecer a esa tribu que maneja una Harley Davison y que recorre el mundo.

Y recorren los kilómetros, primero porque pueden, y segundo porque tienen con que, y como muestra tienen su máquina que les costó, mínimo, 6 mil dólares.

Pertenecer a grupos y banderías nos da entonces identidad.

Los marinos no se visten de blanco porque en el mar se crean impolutos doctores, sino lo hacen porque eso los diferencia de la infantería y los hace sentirse más iguales.

Si es PRI es rojo, si es PRD es amarillo y azul somos el PAN.

A pesar de los cambios y la globalización, seguimos perteneciendo a tribus, y lo hacemos porque así nos pensamos y sentimos plenos y protegidos.

Por algo mi perro no le hace caso a nadie. Hace lo que le da la gana y de cualquier manera come. No trae uniforme, ni colores, y le importa un rábano quien gobierna qué o cómo.

Por eso, cuando descubro en la página oficial del Municipio de Cajeme que al Escudo Oficial le cambiaron sus colores por azules, no lo podía creer.


Entiendo, y le entiendo muy bien, que los colores de una administración son usados como símbolo de pertenencia y distingo de la administración, pero, una cosa es el logo de un trienio que puede ser del color preferido por el alcalde municipal y sus expertos en mercadotecnia, y otra, muy distinta, es quitarle los colores al Escudo Oficial, el cual ha sido escogido para siempre.


Pero bueno, si Fox mochó el Águila por la mitad, ¿por qué no colorearlo todo de azul si para eso ganaron las elecciones?

A ese paso, a lo mejor y la bandera mexicana la pondrían también de tres colores; azul celeste, blanca y azul marino; con lo cual, sin duda, seguiría siendo tricolor. ¿O no?

Con las ganas de volverme perro, para no darme cuenta de estas cosas.

Para consulta de columnas atrasadas, favor www.beckergarcia.blogspot.com

Gracias…

sábado, 26 de septiembre de 2009

Agua pasaba por mi casa...

Palabras Mayores

Bécker García

Las guerras del futuro serán las del agua. Se dice que en el mundo, solamente el 1% del agua es potable y por eso, cada día se requiere de cuidar más la que tenemos.

Por eso me extrañó cuando leí una nota de prensa donde, José Luis Luege Tamargo, de la Comisión Nacional del Agua, marca un tiempo perentorio para que se decida el futuro del agua que habrá de aliviar la escasez de la misma en Hermosillo.

Un mes, dice, para que sea considerado en el presupuesto Federal del 2010 y del 2011.

Y agrega, creo con ligereza, que es necesario considerar tanto la opción de la Desaladora como la de llevar agua de la Presa del Novillo a la capital sonorense.

Este es un viejo dilema. Y como casi todo lo viejo, cargado de asegunes y de mañas.

Para quienes viven en la cuenca del Río Yaqui, quitarle agua a una de sus presas, la del Novillo, significa tanto como dejar de sembrar 10 mil hectáreas cada año.

Y dicen los que saben, que también sería un paliativo que quizá no resuelva el problema de fondo.

Y para ello, la historia.

Desde hace cosa de diez años, en el Valle del Yaqui no existen los famosos segundos cultivos. Antes, se sembraba dos veces al año, porque existía agua suficiente para hacerlo. Pero desde entonces no existe tal cantidad de agua, sobre todo para hacerlo de la llamada manera de inundación. Y es que entonces, agua pasaba por mi casa, y ya no pasa tanto de mi corazón.

Como el Valle es una región eminentemente agrícola, obvio es decir que con esto la derrama económica que provocan las cosechas, se ha visto mermada en un 50%.

Claro, hay algunas maneras de ahorrar agua y hacerla rendir. Sin embargo y hasta la fecha, no hay dinero suficiente que alcance para convertir los riegos a sistemas de ahorro como el goteo, o, abovedar o revestir canales que eviten evaporaciones y filtraciones.

Entonces uno podría pensar que, si se dieran las condiciones para hacerlo, primero tendrían que arreglar acá (en el Yaqui), para con los excedentes provocados por la enmienda, solucionar allá, es decir, en Hermosillo.

Ahora bien, los fenómenos climáticos que han provocado sequías y el aumento de presas para los afluentes del Yaqui, tanto en Estados Unidos con una presa al norte de Douglas, Arizona, como en Chihuahua en el caso del Papigóchic, hacen que nuestras presas tengan cada vez menos agua.

Siguiendo con la historia, ¿quién no recuerda que hace algunos pocos años, la presa Alvaro Obregón u Ovicachic, tenía tan poca agua que hubo de dragar un canal e instalar un sistema de bombeo para que la misma llegara al vertedor y de ahí a los canales principales? Entonces, ¿quién garantiza que la Presa del Novillo tendrá siempre agua suficiente para bombearla hasta Hermosillo?

Y si nos vamos a los fríos números, dicen los que saben, que hay dos dilemas. Es más caro construir un acueducto del Novillo hasta la capital sonorense, que construir una desaladora en Empalme.

Sin embargo, argumentan que la operación de la propia desaladora es más cara que el rebombeo desde el Novillo.

Sin duda estamos ante una encrucijada.

Y yo pienso, creo, que el problema del agua en Sonora debe de resolverse de manera integral.

Construir una desaladora que alimente a Empalme, Guaymas y Hermosillo, con un acueducto junto a la carretera que detone un crecimiento de un corredor poblacional o industrial, pero también modernizar las actividades de riego del Valle del Yaqui, modernizando su infraestructura y su cultura de riego.

Aunque, un mes para tomar una decisión, como lo dice la CNA, me parece sumamente apresurado.

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Gracias…

miércoles, 23 de septiembre de 2009

La lámpara de Diógenes…


Palabras Mayores

Bécker García

No sé que me pasa, pero últimamente las cosas se me pierden con gran facilidad. Por ejemplo, esta semana, traigo pleito casado con los encendedores.

Primero, se me perdió aquel que alguien me regaló junto a un puro, el día de mi cumpleaños.

Luego, un amigo fue a Nueva York y no lo envidié tanto porque me trajo, entre varias cosas, una camisa de los Yankees, un llavero y un encendedor. En dos días, lo había perdido.

Compré otro, en esas tiendas donde venden baratijas impensables y a veces insufribles. Tenía un llamativo color azul, una estilizada figura y, a manera de atractivo, una pequeña lámpara con la cual pretendía me alumbrara las ideas.

Lo malo fue, que el gas se le terminó de la noche a la mañana. A lo mejor y en mi ocasional sonambulismo, me soñé Diógenes y anduve buscando, con el encendedor como lámpara, a un hombre honesto, en lugar de usar la que tenía integrada.

Porque ya lo sabemos, el señor filósofo este, era una especie de loquito que vivía en una tina, tenía una manta, un báculo y un cuenco.

Comía cuando podía y lo que había y decía que el hombre sabio debe de deshacerse de todo bien material que le impidiera ser justo.

Llegó a tal grado, que, al descubrir que un niño carecía de un cuenco para beber agua, de inmediato le regaló el suyo y dijo; este niño me ha enseñado que aún tengo cosas superfúas.

Pero no siempre fue pobre; hijo de un banquero, entre él y su padre cometieron un fraude de falsificación de moneda, por lo cual fueron exiliados.

Cuando marchó al extranjero y ante su pobreza, el esclavo que lo acompañaba lo abandonó. Entonces dijo su gran sentencia; “si mi esclavo puede vivir sin mí, yo también debo vivir sin mi esclavo”.

Entonces y para ya no enfadar tanto a mis lectores y lectoras, quienes me han enviado escritos, correos y mensajes sobre el supuesto abandono de mi “acomodada” vida cercana al Gobierno, parafraseo a Diógenes: si el Gobierno puede vivir sin el Bécker, seguramente el Bécker podrá vivir sin el Gobierno.

Como dijo Obama; Yes, I can do it…

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Gracias…

domingo, 20 de septiembre de 2009

La Toma de Protesta de Manolo Barro

La entrada a la Toma de Protesta de Manolo Barro, no fue, ni de lejos, de "puertas abiertas"

La Agenda no tan padre de Padrés…

Palabras Mayores

Bécker García

Recibí la llamada de un amigo, Ricardo Salazar, para invitarme a comer. Era domingo, estaba yo escribiendo mis Palabras Mayores y me dio mucho gusto escuchar la voz de un talentoso músico, quien también organiza conciertos y todo lo que tiene que ver con audio.

Me dijo que había “sonorizando” el evento donde Guillermo Padrés les daría un mensaje a los cajemenses, justo en la calle Sonora, junto al Mercado Municipal.

Después de comer, de platicar de música, eventos y otras cosas, me dijo que esa misma semana estaría cuatro veces más en el Sur de Sonora, tres de ellas en Cajeme.

Entonces caí en cuenta. En las encuestas que yo tenía sobre las preferencias electorales en ese municipio, Guillermo Padrés iba muy debajo de su principal contrincante. Por lo mismo, creo, el equipo de campaña azul había diseñado intensificar la campaña mediática.

Luego fue claro y evidente: eventos, radios, prensa, cenas, contacto con sociedad civil. Una y otra vez el candidato del PAN regresó al Sur de Sonora hasta que, en las últimas encuestas que tuve en mis manos, 20 días antes de la elección, la ventaja se había acortado significativamente.

Mientras tanto, las corrientes del PRI peleaban la ascendencia sobre su candidato. Querían saber, desde ya, cómo y qué les iba a tocar a la hora de ser gobierno.

No creo que esté equivocado: el Sur de Sonora, principalmente Cajeme, fue quien le dio el triunfo a Guillermo Padrés.

Nada más en el Distrito Electoral XVI, la ventaja fue de casi 11 puntos porcentuales.

Entonces uno pensaría que el nuevo Gobernador puede y debe de tener interlocutores en su Gobierno, precisamente del Sur de Sonora.

Pero los mismos no se han visto.

Nadie esperaría que en el Gabinete del de Cananea, estuviese plagado de gente del Sur del Estado como lo fue en el de su predecesor Eduardo Bours, pero sí, cuando menos, alguna subsecretaría, que bien pudiese haber sido, por el caso, la de Agricultura.

Salvo el caso del Procurador Abel Murrieta, al cual ratificó porque según sus palabras, hizo un muy buen trabajo, nadie de Cajeme quedó dentro de los primeros niveles de Gobierno.

Creo que hubo uno de Huatabampo y listo. Los demás, son del Norte del Estado o de la capital o de plano, como Héctor Larios, de Jalisco.

No pretendo crear un agenda de xenofobia, pero sí, para los alcaldes del Sur, siempre es importante tener un interlocutor dentro del Gobierno.

Sin duda será, para el Gobernador Padrés, una tarea pendiente para la próxima semana.

“Dame una isla, en el medio del mar, llámala libertad” (Miguel Bosé)

Estuve en Cuba hace un año y medio, justo cuando Fidel Castro “heredó” el poder a su hermano Raúl y éste anunció una serie acciones de apertura hacia el pueblo que antes eran impensables.

Los cubanos han sufrido o existido durante cincuenta años la cerrazón de un gobierno “Socialista” en su país. No podían entrar a los Hoteles para turistas, ni comprar en sus tiendas, ni tampoco entrar a ciertas y cuales áreas de la Isla.

Ah, pero no se tratará de la música, porque ahí, a los cubanos, se les olvidan los sufrimientos.

Una noche, dando la vuelta en una esquina, escuchamos música. Por fuera de un restaurante, los cubanos naturales, bailaban escuchando a Buena Vista Social Club, y su candela, que era nuestra candela y la candela de todos.

Por dentro, en las mesas, norteamericanos y europeos miraban extrañados a los bailadores de afuera, que parecía no importarles la barrera de una puerta enrejada.

Por eso Juanes y Bosé, los cantantes de Pop, organizaron un concierto en la Plaza de la Constitución de la Habana, que vive día a día su propia música.

Un millón 150 mil asistentes escucharon la música de estos cantantes, junto a Silvio el Grande (o Rodríguez), Danny Rivera y muchos más, en el concierto de paz.

Bendita la música, benditos los cubanos, y bendito el mexicano que, robándose el espectáculo, izó y ondeó un inmenso lábaro patrio mientras la música rebotaba en la plaza sin fronteras.

Gracias…

jueves, 17 de septiembre de 2009

Crónica de una foto...

Palabras Mayores

Bécker García

Llegaron casi todos; empresarios, políticos, nuevos funcionarios, líderes de barrio y, sobre todo, gente que quería saludar a Manolo Barro de cerca.

El Oscar Russo Voguel se llenó muy rápido. Afuera y en el lobby, los que no estaban en las listas esperaron con ansias la manera de colarse; una televisión de plasma, fue la única opción posible.

Una mujer de mediana edad, buscaba tomarse la foto con Manolo Barro. La bola que avanzaba paso a paso detrás del Gobernador Padrés, la fue aventando hasta las filas de sillas y falló en el intento.

Poco antes de entrar, el Presidente saliente, Francisco Villanueva, llegó escoltado por sus principales colaboradores. Para ellos tampoco hubo un lugar asignado. Como el protocolo lo exige, solo el alcalde que sale y su Secretario, entregaron en el presidium los llamados libros blancos. Los otros, se refugiaron en el lobby.

Alguien, no supe su nombre, cantó el Himno Nacional con una asopranada voz. Para mi gusto, con tanta potencia en el timbre, hubiese sido mejor cantarlo sin micrófono.

Luego, los honores a la bandera de parte de la Escolta de Policía y Tránsito.

A la hora de entregar los libros blancos – donde se guardan los haberes del Ayuntamiento –, algo le dice Manolo a Villanueva y los tres, incluido Padrés, sueltan la risa.

Villanueva, como debe ser, le toma la protesta a los ediles entrantes, mientras los salientes son solamente espectadores. Manolo Barro grita sí protesto y abraza al Síndico Jorge Russo.

Si alguien me hubiese apostado, hubiera jurado que al oído le dijo: ¡la hicimos!

Manolo habla. Utiliza el mismo tono, el mismo ritmo, de cuando anduvo en campaña. Pidió, unión. Y también solicitó que todos los cajemenses, los que votaron y los que no votaron por él, le ayudaran a gobernar; “porque lo de él será un gobierno de cara a la gente”.

Aprovechó la recta. Levantó la mirada del papel donde traía escrito su discurso; lo dejó por un lado, limpió su garganta y soltó el sopetón. Aprovechando, le dijo a Padrés, su estancia aquí, quiero pedirle recursos para el Sur de Sonora… y corrigió en el acto; para Cajeme.

Sonrieron.

Manolo cierra su discurso con fuerza. Repite la unidad, la apertura, las necesidades están dadas para crecer y claro, por supuesto, el viva Cajeme con voz que retumba en el recinto.

Ahora, ahora va Guillermo Padrés. Manolo, disfrútalo, le dice, y a Manolo Barro parece que le va a estallar el pecho.

Reafirma su compromiso con Cajeme y dice que conoce a Manolo y a su labor social y que por eso sabe que les va a ir bien a los cajemenses.

La famosa civilidad política, donde deben de coexistir las distintas corrientes forma también parte del discurso del recientemente estrenado Gobernador.

Manolo – le contesta a la petición de apoyo –, no te equivocaste conmigo; tendrás todo mi apoyo y de seguro serás uno de los mejores alcaldes que ha tenido Cajeme.

Luego fueron los abrazos, los gritos, los aplausos y las vivas.

Mientras Manolo se queda un buen rato arriba del escenario y la gente se le arremolina para abrazarlo, Guillermo Padrés abandona el recinto. Dicen, irá también a Navojoa para atestiguar la cuarta toma de protesta del día. Antes de Cajeme, Hermosillo y Guaymas contaron con su presencia.

Manolo y su esposa bajan las escaleras rodeados de seguidores. Lo entrevista en la radio; lo apuran porque tendrá que ir a palacio para su primer sesión de cabildo donde tendrán que aprobar los nombramientos legales. Seguridad Pública, Tesorería, Contraloría y la misma Secretaría del Ayuntamiento.

En el lobby, junto a las escaleras, su padre don Manolo, con sus zetas y sus marcadas eses de español de pura cepa, lo abraza y le dice algo así como “esto apenas inicia”. El alcalde le da un beso en cada mejilla, mientras la gente aplaude.

Y corre, sale volando, porque en cabildo lo esperan y van tarde.

Al final, cuando el ruido y la polvareda se disipan, la mujer de la foto aparece sonriente:

- ¿lograste la foto?

- No - me contesta -, pero no importa, ya lo dijo “el Manolo”; tendrá las puertas de su oficina abiertas a todos los cajemenses y ahí lo voy a agarrar, aunque no ande tan guapo como con ese traje.

Gracias…



domingo, 13 de septiembre de 2009

La política en Familia...

Palabras Mayores

Bécker García

Por distintas circunstancias no había podido hablar (bueno, en realidad escribir) de los Kennedy, ahora que murió el último de los hijos de papá Joe, el padre de quienes fueron en el siglo XX, determinantes en la política de Estados Unidos.

La historia de los Kennedy se remonta al tiempo en que Joseph, el padre, supo acrecentar su fortuna en la Gran Depresión estadounidense, pues, con información privilegiada, supo como y donde comprar bienes inmobiliarios a precios irrisorios que con el tiempo le aportaron grandes ganancias.

Con estas utilidades que si bien es cierto no son del todo morales, sí son completamente lícitas, se limpió el nombre de alguien que había hecho su dinero inicial con el tráfico de licor durante la “Ley Seca”.

Tuvo varios hijos, el primero de ellos – y al parecer el consentido – de nombre Joseph, murió a bordo de un bombardero durante la segunda guerra mundial, como después ocurrió, aunque en condiciones distintas, con otros tres de los nueve hijos que procreó con su esposa Rosemary Fiztgerald.

Cuando traficaba con licor, la mafia Judía de Detroit amenazó con matarlo si acaso no compartía las ganancias. Debido a sus ancestros Irlandeses, su catolicismo le abrió las puertas para que otro grupo mafioso le brindara protección, la cual encontró con los Italianos, entre los cuales destacaba Sam Giancana.

Educó a sus hijos John, Robert y Edward, con la férrea disciplina de quien veía en ellos la posibilidad de cumplir uno de sus mas acariciados sueños; que un Kennedy fuese Presidente del país más poderoso del mundo.

Pero también les dio el glamour que las nacientes estrellas cinematográficas acaparaban las miradas de los norteamericanos y, desde su adolescencia, los rodeaba de artistas “para que aprendieran la manera de conducirse ante el mundo”.

Al momento de disputar la candidatura contra un anquilosado Richard Nixon, el ahora mayor de los Kennedy, John, lo hizo pedazos ante las mismas cámaras en el primer debate televisado de la historia política del planeta.

Empero, aún ahora y aunque pareciera lo contrario, las elecciones no se ganan solamente con la pantalla chica o los otros medios de comunicación; en ese tiempo, los Kennedy sabían que necesitaban la aprobación de los sindicatos de trabajadores y recurrieron, de nuevo, a quien los controlaba; La Mafia Italiana.

Sam Giancana, se relamió los bigotes (en ese entonces no usaba tal) cuando papá Joe le pidió un segundo favor, éste, con mayor relevancia y oportunidad para la mafia.

Al llegar a la Presidencia, ni John, ni tampoco papá Joe, le respondieron el teléfono a Giancana y, en cambió, Robert, nombrado Procurador por su hermano, inició una campaña en contra del crimen organizado, es decir, contra las distintas mafias.

Debido a los grandes intereses que los mafiosos tenían en Cuba y cuando se dieron cuenta de que los Kennedy no los iban ayudar contra Fidel Castro y sus revolucionarios, echaron la suerte.

El resto ya lo sabemos; nunca se aclaró del todo la muerte de JFK, ni la de, 5 años después, su hermano Robert. Tampoco se aclaró la de Marilyn Monroe, quien murió de una supuesta sobredosis después de haber sido acompañada por Robert. Las sospechas recaen por donde se mire, en una revancha de la mafia.

Algunos se preguntaran el porque el menor de los hermanos, Edward, no se lanzó a buscar la más mullida silla de la Casa Blanca y he aquí otra oscura historia: Cuando se encontraba en la Isla de Chappaquiddick, haciendo una carne asada y bebiendo sus tradicionales martinis, invitó a una jóven de 28 años a dar una vuelta. Al cruzar el puente, el carro cayó al agua y la mujer murió ahogada. Diez horas después, dio parte a la policía. Su excusa; quedó tan cansado al intentar salvarla, que se fue a dormir a su casa. La sospecha; Ted estaba completamente borracho y espero ese tiempo para que las alcohólicas evidencias se borraran de su sangre.

Ahora que ha muerto el último de esa generación de los Kennedy, parece no haber una esperanza renovadora para continuar con la corriente de la familia mas influyente en el vecino país.

Sin embargo, aún en estas fechas, es indudable la influencia democrática que aportaron los Kennedy a la política estadounidense y por eso, la partida de Ted, es una gran pérdida.

Se me olvidó otra vez…

En youtube (http://bit.ly/8TSIY); cualquiera puede ver las propuestas económicas que en el 2006 y durante el debate hizo el Presidente Calderón cuando era candidato.

“Voy a reducir impuestos”, dijo. Peeero, como la canción de Juan Gabriel; se me olvidó otra vez…

Gracias…


jueves, 10 de septiembre de 2009

Que buenos somos!!!... dijeron ellos...

Palabras Mayores

Bécker García

¿Qué fue lo que realmente pasó en el vuelo 567 de Cancún a la Ciudad de México? Puedo entender muchas cosas, pero esta, se sale de todo contexto.

Un pastor cristiano, músico, cantante, ex adicto a las drogas y al alcohol, toma un avión y moviliza a un país.

Hay varias lecturas, dignas de insertar en la novela “El proceso” de Kafka.

Lo pequeño que se ha convertido el mundo: Una de las pasajeras dice que ni cuenta se dieron del secuestro, hasta que, ya estando el avión en tierra, un primo le llamó desde Atlanta para decirle que en México habían secuestrado un avión de pasajeros; ¡Somos nosotros¡, dijo.

Lo hilarante: En televisión, frente a las cámaras, el pastor, José Mar Flores Pereira, es entrevistado: ¿Quiénes son sus cómplices?... El padre, el hijo y el espíritu santo.

El supuesto motivo: Tenía que darle un mensaje al Presidente Felipe Calderón de que un gran terremoto de magnitud nunca vista, azotaría la Ciudad de México el próximo 16 de septiembre.

Lo peor del caso es que ya hay un ejército de creyentes de la absurda profecía.

Dicen, los que viajaron con él, que se movía de un lado a otro del avión, y hasta se hincó para ponerse a rezar y a recitar versículos de la Biblia.

Este pastor, que vive de dar conciertos y pláticas sobre Cristo, preparó bien sus quince minutos de fama. Cuatro latas de Jumex rellenas de tierra, cinta canela para unirlas y un marcador digital (al cual él llama “lucecitas”) fueron su supuesta bomba. Es decir, subió con ellas al avión sin que le detectaran nada a la hora de la revisión.

Una vez en el avión, habló con la tripulación y les ordenó que dieran siete vueltas a la Ciudad de México antes de aterrizar.

Me imagino que con los antecedentes de los rezos, las letanías y las profecías, hubieran sido suficientes para que las sobrecargos o el piloto, se hubiesen percatado que el tipo era un “chifladito”.

Si la psicosis post 11 de septiembre y el lío de las Torres Gemelas no existiera, de seguro lo hubieran sentado al final del avión y le hubiesen convencido de que, en cuanto aterrizaran les cumplirían sus peticiones: “Hasta en limosuina te llevaremos a Los Pinos para que alertes al Presidente”

Pero no, los de Aeromexico sobredimensionaron el problema y el Gobierno aprovechó la recta.

“Ni un disparo” dijo Felipe Calderón y se autoelogió; “Felicito al Gabinete de Seguridad”, del cual él es la cabeza.

Mientras que Aeromexico no supo manejar la crisis e hizo una tormenta en un vaso de agua, el Gobierno Federal aprovechó la misma y se autoquebró huevos con confeti. Somos muy fregones. Ni un disparo. ¿lo entienden?. Ni un disparo.

El horno no está para bollos y como lo dije aquí antes, cualquier cosa es aprovechada para vanagloriarnos, de algo que parece no tener ni píes ni cabeza.

Mientras; todos nos olvidamos de las intenciones del Gobierno de aumentarnos impuestos.

Dios Salve a nuestro país.

Amén

Gracias…



martes, 8 de septiembre de 2009

El sida ya tiene rostros..

Palabras Mayores

Bécker García

 

El comercial es impactante. Fuerte. Duro. Rudo y hasta un poco soez. Puede ofender la moral de quienes lo ven, o, de quienes se pueden sentir aludidos.

En la escena, los prolegómenos de un acto sexual. Una pareja entra a una habitación, de prisa, buscando hacer lo que evidentemente les urge a ambos.

El reloj despertador, con luminosa luz verde, marca la hora. 2:33.

El rostro de ella, que aparece en primer plano, acezante, recibe los besos y las caricias de su compañero.

La ropa sobra. Ella a él, y viceversa, se desnudan.

Luego aparece una especie de cortina, que puede ser la vista desde detrás de un biombo acrílico, pero que, flexible, parecería una sábana vista de abajo hacía arriba.

Después vienen las escenas más fuertes, donde ellos se entregan a la pasión.

Casi al final de los escasos cincuenta segundos que dura el comercial, podemos ver, al fin, la cara del amante hombre. El impacto es brutal: Adolfo Hitler en persona – o, mejor dicho, en recreación –.

Luego un letrero, negro con letras blancas: “El sida es una asesino de masas”.

Cambio en el mismo fondo y agrega. “Protégete”.

La campaña en contra del Sida, propuesta por la compañía alemana Das Comitee, especialista en publicidad, ha levantado más críticas que alabanzas.

Promovida por una ONG que lucha para que la gente se percate de la grave enfermedad que apareció en el mundo a principios de los años ochentas del siglo pasado, utiliza el rostro del dictador alemán, pero también el de Saddam Hussein y el de José Stalin. Los compara, dice, con exterminadores de masas.

Detrás del comercial, se escucha una voz; es la de Joseph Goebbels, el inventor de la propaganda nazi.

La misma campaña está siendo promovida en los países europeos, porque aseguran, en América aún no están preparados para comerciales tan fuertes. Lo que no me queda claro es si se refieren a las escenas o al mensaje.

Las quejas de quienes han visto el comercial, versan en que él mismo está demeritando a las personas enfermas del mal, comparándolos con asesinos de masas.

La respuesta de los publicistas y de la propia ONG, dice que al fin se le puso rostro a la terrible enfermedad que ha matado a 28 millones de personas alrededor del mundo.

Quizá, no lo puedo afirmar, estigmatiza más que prevenir, porque en realidad no habla sobre los distintos métodos de protección que existen contra el mal, incluyendo, por supuesto, la fidelidad y la abstinencia que tanto pregona la Iglesia Católica.

Lo que si me recuerda, es que el Sida, a pesar de que ahora con dinero puede dejar se ser mortal, está siendo mirado de soslayo por muchas autoridades sanitarias.

Lo ocultan, lo esconden, lo niegan.

Bastaría con darse una vueltecita por los poblados donde se aglomeran trabajadores migratorios que vienen del sur, como es el caso del poblado Miguel Alemán en Hermosillo, para percatarnos de que sigue siendo un problema grave.

Pero como todo, y es lo triste, mientras los decesos vengan de la sociedad más desprotegida, parece no importarle a nadie.

Ojala que, como sea, retomemos las medidas de prevención para bien de la sociedad.

 


jueves, 3 de septiembre de 2009

De cuando fui funcionario público

Creo que ya comenté sobre mi renovación en lecturas anteriores. Releer (si acaso la palabra es válida, porque en cada lectura uno aprende cosas que antes no se percató) es ahora mi misión.

Antiguas letras que me emocionan.

Afuera, acá en Cajeme, llueve y eso me produce algo así como saudade. Como ya lo sabemos, esa palabra en portugués (y creo que también en Gallego) describe una profunda melancolía provocada por una ausencia o una alegría anterior que no regresa.

Así estoy con tanta lluvia. Y eso que no ando por Guaymas donde se dice, rompieron récord estatal en precipitaciones pluviales y a lo mejor, con tanto chipi-chipi de Jimena la Tormentosa, hasta hubiese contribuido yo con dos o tres lacrimosas gotas al torrente de 522 mm. de agua, siendo lo que sea que signifique lo anterior.

Y para no estar así, para no contagiar a nadie y como dicen algunos que afirman que la lectura alivia y puede con todo, les comparto un escrito de Julio Cortázar, en su Historia de Cronopios y de Famas. Recordando que, el argentino nacido en Bruselas, escribió esto donde, grosso modo; los famas son una especie de ricos, los cronopios la clase media y las esperanzas los pobres.

Yo me reí mucho, quizá recordando los tiempos en los que fui Servidor Público.


Inconvenientes en los servicios públicos

De Julio Cortázar... Por supuesto..   

 Vea lo que pasa cuando se confía en los cronopios. Apenas lo habían nombrado Director General de Radiodifusión, este cronopio llamó a unos traductores de la calle San Martín y les hizo traducir todos los textos, avisos y canciones al rumano, lengua no muy popular en la Argentina.
    A las ocho de la mañana los famas empezaron a encender sus receptores, deseosos de escuchar los boletines así como los anuncios del Geniol y del Aceite Cocinero que es de todos el primero. Y los escucharon, pero en rumano, de modo que solamente entendían la marca del producto. Profundamente asombrados, los famas sacudían los receptores pero todo seguía en rumano, hasta el tango Esta noche me emborracho, y el teléfono de la Dirección General de Radiodifusión estaba atendido por una señorita que contestaba en rumano a las clamorosas reclamaciones, con lo cual se fomentaba una confusión padre.
    Enterado de esto el Superior Gobierno mandó fusilar al cronopio que así mancillaba las tradiciones de la patria. Por desgracia el pelotón estaba formado por cronopios conscriptos, que en vez de tirar sobre el ex Director General lo hicieron sobre la muchedumbre congregada en la Plaza de Mayo, con tan buena puntería que bajaron a seis oficiales de marina y a un farmacéutico. Acudió un pelotón de famas, el cronopio fue debidamente fusilado, y en su reemplazo se designó a un distinguido autor de canciones folklóricas y de un ensayo sobre la materia gris. Este fama restableció el idioma nacional en la radiotelefonía, pero pasó que los famas habían perdido la confianza y casi no encendían los receptores. Muchos famas, pesimistas por naturaleza, habían comprado diccionarios y manuales de rumano, así como vidas del rey Carol y de la señora Lupescu. El rumano se puso de moda a pesar de la cólera del Superior Gobierno, y a la tumba del cronopio iban furtivamente delegaciones que dejaban caer sus lágrimas y sus tarjetas donde proliferaban nombres conocidos en Bucarest, ciudad de filatelistas y atentados.