Ganar la Calle…

Palabras Mayores

Bécker García

Dice Escalante Gonzalbo, que las protestas sociales se dan cuando los oídos de los gobernantes se cierran, y lo estoy comprobando.

Una vez más, un sector de la sociedad cajemense se vuelca a las calles a marchar en lo que será la tercera protestas en contra, no del Sonora sí, sino encontra del acueducto del Novillo.

Me lo dijo un político que le entiende a esto y le entiende bien; “no hay ley que permita llevar agua de una cuenca a otra, si antes no se han agotado las posibilidades en la misma por tanto, ese acueducto nació muerto”, y suena como verdad, sin embargo, en este país de caleidoscopios, cada quien interpreta la ley a su libre conveniencia y algunos, por si las moscas, se niegan a bajar la guardia.

Creo entonces que aún cuando todo pareciera estar en contra para la realización de la obra, la verdad es que, escamados y perplejos ante la insistencia gubernamental todos esperan una salida en el cerco viejo.

Antes de continuar quiero hacer una aclaración pertinente. La mesa técnica que rompió las pláticas con el Gobierno del Estado y con CONAGUA el viernes pasado, no es, como algunos me lo preguntaron, una simple reunión de ingenieros expertos en agua, sino la suma de las coincidencias de los organismos agrícolas, sociales y privados, junto al Distrito de Riego del Río Yaqui, CANACINTRA, CANACO, y el resto de los organismos colegiados en Cajeme, con lo cual, se puede afirmar que la suspensión del diálogo de sordos fue con la representatividad total de los habitantes de ese municipio.

Retomando en tema de los movimientos y como lo dicen ellos, este jueves, es decir mañana, a las 4 de la tarde, los jóvenes marcharan por las calles de Cajeme, desde el Teatro del ITSON, para terminar frente a palacio municipal, con la intención de clarificar que tampoco están de acuerdo con el acueducto al Novillo.

Creo que es preocupante el hecho que, luego de muchos años, las marchas de estudiantes no se hayan dado en nuestro país y que hoy, en pocos días, confluyan dos movimientos estudiantiles que si bien es cierto nada tienen que ver en sus causas y motivos entre sí, coinciden en provenir de jóvenes y eso debe de preocupar y ocupar a quienes gobiernan este país, porque es justamente con los que alguna vez, allá por 1968, se inició el cambio democrático del que ahora goza nuestro país.

La marcha de alumnos del Tec de Monterrey tiene su significado en contra de la violencia que se vivió hace poco dentro de su campus, como también lo tiene la marcha que jóvenes universitarios realizaran el día de mañana y que se niegan a vender su futuro de progreso y oportunidades.

Sin embargo las perspectivas son distintas. Mientras a Monterrey ha acudido el Secretario Gómez Mont, buscando calmar los ánimos, acá en Cajeme a los ingeniosos dirigentes del Instituto Sonorense de la Juventud se les ha ocurrido organizar otro evento, a la misma hora y dirigido al mismo público.

Si bien antes, con la primera megamarcha del 5 de marzo trataron de minimizarla con otra de un supuesto apoyo al Sonora Sí, ahora se les ha ocurrido la brillante idea de hacer un evento paralelo y competir en músculo contra los muchachos.

No se han puesto a pensar que estos truquitos, solo conseguirán que los jóvenes que participarán en la marcha lo hagan con mas ganas, afortunadamente en son de paz, pero con el convencimiento de que este tipo de artimañas solamente se utilizan cuando las razones se acaban.

Yo creo que la marcha de los muchachos del jueves, aún cuando sean 10, 100 o 10 mil, será todo un éxito porque lograrán participar bajo su propio convencimiento y lograrán desenmascarar a un proyecto sin sustento, donde pocos, muy pocos, pretenden engañar al Gobernador Padrés quien sabe con qué intenciones.

Gracias…

Para columnas atrasadas…

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