Estaba en la Ciudad de México, hace
cosa de un mes, y necesitaba efectivo para hacer algunos pagos que no podía
hacerlos con mi tarjeta, demás, de verificar mi saldo y sacar mis cuentas.
Llegué al cajero, con ganas de que por
algún extraño milagro, mi magra cuenta no estuviera tan de plano seca.
Junto a mi, una pareja de jovencitas hacía
lo mismo, pero doble, es decir, las dos traen su propia tarjeta, por lo cual
supongo, tienen dos veces más de posibilidades de exprimir mejor el ATM.
¿Alguna vez se han preguntado porqué
para indicar que en tal o cual parte existe uno o varios cajeros, les ponen el
letrero de ATM? No, no significa A toda mad.. (que normalmente es lo
contrario), ni tampoco Ahorita Todo Murió, refiriéndose a tu dinero. Significa,
Automatic Teller Machine: algo así como máquina automática que habla, creo.
Aunque “teller” puede ser también
utilizado como alguien que narra, que cuenta algo.
El caso es que, estaba sacando cuentas
con lo que necesito contra lo que me narra el cajero que tengo disponible, y,
pues, resulta que la diferencia es abismal, por lo cual, me convencí que esta
máquina narradora, cuenta historias de terror tipo Lovecraft.
Cosas curiosas que me pasan y por lo
metiche que soy, pero resulta que la pareja de justo al lado, hacía cuentas de
cuánto necesitaban para pagar renta, gasolina y hacer el súper. Total, quedaron
de acuerdo que cada una de ellas, debería de ponerse con 4800 pesos para hacer
frente a sus gastos.
Cada una de estas mujeres esperó su
turno para exprimir a la máquina narradora, tomó su dinero y salieron muy
campantes, tomadas de la mano.
Desde hace muchos años, en ciertas
partes de la Ciudad de México, las parejas del mismo sexo conviven sin mayores
ocultamientos o vergüenzas.
En el año del 2009, la Asamblea
Legislativa cambió la ley para que personas del mismo sexo pudieran celebrar su
matrimonio y fue reglamentado el 2010.
Las personas con preferencias sexuales
homo, supongo no buscan la manera celebrar una boda de blancos y negros, que de
cualquier manera lo pueden hacer, sino lo primordial para ellos es que, les
sean reconocidos sus derechos a mutua seguridad social, a heredarse en sus
bienes y todo aquello que conlleva un matrimonio de los llamados normales.
En el resto de los estados, un pareja
del mismo sexo no puede inscribir, por ejemplo, a su compañer@ en el servicio
médico o simplemente, no lo podría poner de beneficiario en caso de contratar
un seguro de vida, al no existir un interés asegurable. Así, podrían acumular
dinero suficiente en ahorros y bienes, mismos que, si la muerte los
sorprendiera, irían a parar a terceras personas.
En Sonora la ley sigue siendo clara:
para que se pueda realizar un matrimonio de este tipo, se debe de contar con un
amparo.
A raíz de la pronunciación del
Presidente Peña Nieto para legalizar en todo el país a favor de este tipo de
matrimonios, se desataron los demonios exigiendo que desde ya, se otorgara el
permiso. Y, ¿la ley?
El caso es que, primero se debe de
cambiar la ley, para evitar el amparo, pero al final del día, todo va
encaminado en ese sentido y, creo, lo demás, es una falsa discusión.
Me quedé junto al cajero narrador todavía
un rato más, y por la ventana pude ver a la pareja caminar tranquila por la
calle, sin estridencias, sin falsas poses, con la civilización de sus gustos no
escondidos, como debió hacer desde siempre.
Gracias
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